La línea Polaris de Jaeger-LeCoultre, nacía en 2018 en inspiración del icónico Memovox Polaris de 1968. Ahora, los modelos con cronógrafo se actualizan con dos nuevas referencias caracterizadas por sendas esferas visualmente impactantes fruto de la enorme habilidad de JLC en su diseño y fabricación.
Ambas esferas presentan superficies lacadas, una en azul intenso y la otra en un cálido tono gris, un nuevo color en la cartera de Jaeger-LeCoultre. Se componen de un disco central y un anillo central en el que se aplican los índices horarios, junto con un anillo exterior marcado con la escala taquimétrica. Tanto en el disco central como en el anillo de las horas, el color de la laca se gradúa de claro a oscuro, añadiendo profundidad visual a las esferas.
Esferas lacadas en gris y azul
El proceso de lacado es largo y desafiante, y cada capa de recubrimiento se aplica manualmente. Comienza con una capa de barniz transparente, seguida de una capa de color y luego de 35 capas de laca translúcida para agregar profundidad y riqueza. El proceso concluye puliendo los componentes para lograr un acabado brillante a espejo.
El diseño de la nueva esfera de los Polaris Chronograph ofrece una excelente legibilidad, con grandes agujas esqueletizadas y atrevidos índices en forma de trapezoide rellenos de un revestimiento luminiscente.
Equilibrada por el contador de 30 minutos, situado a las 3 en punto, la subesfera a las 9 horas ha sido rediseñada para mostrar el segundero principal, reemplazando el contador de 12 horas que encontrábamos en los modelos previos.
El veteado circular de estas subesferas contrasta con el alto brillo de las superficies lacadas y el acabado opalino del anillo exterior. Los detalles en naranja añaden dinamismo al conjunto. Sin duda, el refinamiento de estos nuevos diales añade mucha más riqueza a un diseño deportivo como el del Polaris.
El fondo monta un cristal de zafiro que revela el movimiento, automático y manufactura JLC, el Calibre 761, que funciona a una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora).
Almacenando energía en dos barriletes, este movimiento, un cronógrafo totalmente integrado, cuenta con rueda de pilares y embrague vertical, ofreciendo muy buena una reserva de marcha, de 65 horas.
Los acabados incluyen tornillos azulados y decoración de Côtes de Genève en la placa base, así como en el característico rotor de cuerda calado que lleva el motivo “JL”.
La caja, de acero inoxidable y de 42 mm de diámetro, alterna entre superficies cepilladas y pulidas, presentando los elementos clave del diseño del Polaris: tensas líneas, asas marcadamente curvadas, un bisel delgado y un cristal abombado. La resistencia al agua está garantizada hasta una presión de 10 bar (100 metros/330 pies).
Cada nuevo Polaris Chrongraph viene acompañado de dos correas fácilmente intercambiables: El de esfera azul se complementa con un brazalete de acero y una correa de caucho azul texturizada con un patrón ‘Clous de Paris’, mientras que el reloj de esfera gris se complementa con una correa de lona beige y una correa de caucho negra con una textura similar.
Referencias y precios
El nuevo Jaeger-LeCoultre Polaris Chronograph tiene un precio de 15.800 euros con esfera gris (ref. Q902843J), y de 16.400 euros con esfera azul (ref. Q9028181).
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