El IWC Portugieser Perpetual Calendar, modelo emblemático de la marca, recibe una profunda actualización que se ha presentado la pasada semana en el Watches and Wonders celebrado en Ginebra.
La colección se enriquece con cuatro nuevas versiones, dos en oro blanco y dos en Armor Gold, ofreciendo esferas en tonalidades azul Horizon, color arena (Dune), negro obsidiana y plateado. Más allá de los nuevos colores, el calendario perpetuo se destaca como una de las complicaciones más distintivas de IWC, diseñado originalmente por Kurt Klaus en la década de 1980.
Este módulo de calendario, conocido por su excepcional autonomía y fiabilidad, incluye un número modesto de componentes y ha evolucionado significativamente desde su introducción. En 2003, se mejoró la precisión de la indicación de las fases lunares de 122 a 577,5 años gracias a un engranaje reductor más grande adaptado al tamaño ampliado de la caja. Además, se introdujo la innovadora visualización Double Moon que refleja las fases lunares tanto del hemisferio norte como del sur.
Las cajas del nuevo IWC Portugieser Perpetual Calendar han sido rediseñadas a 44,4 mm de diámetro, manteniendo un grosor de 14,9 mm pero con un perfil más delgado y una carrura más fina. Se incorpora cristal de zafiro en forma de caja en ambos lados del reloj, lo que reduce el peso total y mejora la resistencia al agua hasta los 50 metros.
El detalle se extiende a las esferas, que ahora presentan 15 capas de laca transparente, finamente esmeriladas y pulidas, y subesferas de calendario fresadas en latón. Los índices montados a mano complementan la disposición clásica de las esferas, con subesferas para el día de la semana y los segundos en funcionamiento a las 9, la fecha y la reserva de marcha a las 3, el mes y el indicador del año a las 6, y la visualización de la Doble Luna a las 12. Todas estas funciones se ajustan a través de la corona, un tributo al diseño pionero de Klaus.
El movimiento que impulsa estos relojes, manufactura IWC, es el Calibre 52616, con una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y una reserva de marcha de 7 días gracias a su sistema de cuerda automática Pellaton, con componentes de cerámica de óxido de circonio. Este movimiento, compuesto por 385 partes, de las cuales 81 están dedicadas al módulo de calendario, incluye un escape mejorado para protección contra campos magnéticos y una masa oscilante de oro macizo visible a través del fondo de zafiro del reloj.
Estos modelos están disponibles con correas de piel de becerro o de aligátor de Santoni, ajustándose a los colores y materiales de las cajas y esferas. Las nuevas referencias IW5037 tienen precios que comienzan en 50.000 euros, reflejando el refinamiento y la sofisticación técnica del IWC Portugieser Perpetual Calendar 44.
Referencias
IW503703 – caja de oro blanco, esfera Blue Horizon, con un precio de 51.000 euros
IW503704 – caja de oro blanco, esfera Dune, en 51.000 euros
IW503702 – Caja Armor Gold, esfera Obsidian, en 50.000 euros
IW503701 – Caja Armor Gold, esfera plateada, con un precio de 50.000 euros
Las novedades de IWC para este 2024 empiezan realmente fuerte, con un reloj para el que no hay calificativos y que probablemente optará a un récord Guinness
IWC presenta su innovación en relojería con el Portugieser Eternal Calendar ref. IW505701, un logro monumental que redefine la precisión y la durabilidad. Este reloj es el primero de su tipo en incorporar un calendario perpetuo secular capaz de operar sin ajustes hasta el año 3999, gracias a un ingenioso mecanismo que supera las limitaciones de los calendarios gregorianos tradicionales. Su indicador de fase lunar alcanza una precisión tal que sólo requerirá un día de ajuste cada 45 millones de años, estableciendo un nuevo estándar en la industria relojera.
El Calendario Eterno de IWC, presentado en Watches and Wonders 2024, es un ejemplo excepcional de la maestría de la marca en la complejidad técnica. Este reloj destaca por su capacidad para adaptarse a las irregularidades del calendario gregoriano sin necesidad de ajustes manuales hasta el cuarto milenio, un logro respaldado por su avanzado diseño mecánico, que incluye un mecanismo especial de 400 años.
Un calendario perpetuo para la eternidad
El reloj se basa en siglos de avances astronómicos, reflejando la larga historia de la humanidad en la medición precisa del tiempo y los ciclos celestes. El calendario gregoriano, que rige nuestras vidas desde 1582, se basa en la inclusión de un día bisiesto cada cuatro años para compensar el tiempo exacto que tarda la Tierra en orbitar alrededor del Sol. Sin embargo, el Calendario Eterno de IWC va más allá al integrar un mecanismo que omite adecuadamente los años bisiestos excepcionales cada cuatro siglos, solucionando una complejidad histórica del calendario gregoriano.
Este reloj no sólo es una proeza técnica sino también un objeto de arte. Alojado en una caja de platino de generosas dimensiones (44 mm de diámetro y 15 mm de grosor), ofrece una visibilidad excepcional de su esfera gracias a un diseño minimalista del bisel. La herencia del Portugieser se manifiesta en su estética pura y funcionalidad precisa, características que se han mantenido fieles en esta nueva iteración que establece los códigos de diseño para futuras colecciones. El acabado es pulido y satinado y cuenta con cristales de zafiro de doble cúpula tanto para proteger la esfera como para la parte trasera. La hermeticidad está garantizada hasta 50 metros.
Calibre 52460
Este Portugieser Calendario Eterno va impulsado por el calibre IWC 52460, una obra maestra de la ingeniería que combina la tradicional cuerda Pellaton con una reserva de marcha de siete días. Este movimiento mecánico no sólo es eficiente sino que también demuestra la dedicación de IWC a la durabilidad y la precisión a largo plazo.
La disposición de las funciones del calendario es exactamente igual a las del Calendario Perpetuo de Kurt Klaus: fases lunares al mediodía, tres subesferas con información del calendario y una ventana de año de cuatro dígitos entre las 7 y las 8 en punto. Basado en el mismo diseño modular que el calendario perpetuo, todas las indicaciones del Portugieser Eternal Calendar se pueden ajustar mediante la corona.
En términos de diseño, el reloj fusiona la transparencia y la translucidez con elementos de cristal de zafiro que dan una sensación de profundidad y espacio. La esfera, de cristal lacado en blanco, y las subesferas flotantes añaden una dimensión etérea al conjunto, mientras que el indicador de fase lunar ofrece una representación celestial precisa y bellamente ejecutada. Se combina con una hermosa correa de aligátor Santoni negra y un cierre desplegable de platino.
El IWC Portugieser Calendario Eterno es una pieza de coleccionista excepcional que no sólo destaca por su complejidad técnica sino también por su belleza y precisión sin precedentes. Aunque el precio aún está por confirmar, su lanzamiento es muy esperado por aficionados y coleccionistas de relojes de todo el mundo, marcando un momento histórico en la relojería de lujo.
IWC también da la bienvenida al Año del Dragón con un Portugieser en un tono burdeos y dorado que realmente le favorece
Además del mes de diciembre, este mes de enero de 2024 verá a muchas de las principales marcas de relojes subirse a la ola de la celebración del Año Nuevo Chino, representado por una de las criaturas más atractivas que agregar a la temática de un reloj. Esta edición limitada del Portugieser de IWC hace alarde de un rojo burdeos, color asociado con la buena suerte y la prosperidad en la cultura asiática. El enfoque prudente para la parte frontal deja paso a una trasera que muestra su riqueza visual en la masa oscilante, en oro y grabada con un detallado dragón.
El movimiento actual de la referencia base del Portugieser, IW3716, con rueda de pilares ha añadido una gran robustez y fiabilidad a este legendario modelo, que ahora se convierte en edición limitada con este enfoque tan especial, que mantiente la característica caja, de acero inoxidable y con un diámetro de 41 mm. El grosor es de 13 mm y cuenta con pulsadores de tipo pistón y un delgado bisel que otorga el protagonismo a la maravillosa esfera del Portugieser, un diseño ganador prácticamente con cualquier color, por lo que no es de extrañar que la combinación en rojo, baño dorado para las manecillas y estampado en polvo de oro para los índices, sin rastro de material luminiscente, resulte encantadora y se compense perfectamente. La resistencia al agua es de 30 metros y el cristal es de zafiro con tratamiento antirreflejos.
La mítica disposición vertical de los dos contadores en forma de caracol (totalizador de 30 minutos al mediodía y segundero pequeño a las 6), se mantiene, al igual que las elegantes agujas para las horas y los minutos, en forma de hoja. Los mencionados índices se acompañan de puntos en la pista de minutos, mientras que el perímetro, biselado, alberga el realce impreso con una escala de cuarto de segundo para lecturas precisas del cronógrafo en la indicación mediante el delgado segundero central.
El movimiento es el Calibre 69335 de IWC, manufactura y automático. Preciso y con una remarcable fiabilidad, la rueda de pilares garantiza un funcionamiento suave. Cuenta con un sistema de cuerda con trinquete bidireccional y la frecuencia es de 28.800 alternancias/hora, para una reserva de marcha de 46 horas. Como indicábamoms, en honor al Año del Dragón, la parte exterior del rotor, calado y bañado en oro, alberga un dragón oriental, visible a través de un segundo cristal de zafiro.
Dotación, disponibilidad y precio
Acompañado de una correa de piel de becerro negra con cierre de mariposa y una correa adicional de caucho color burdeos, este IWC Portugieser Chronograph Year of the Dragon, referencia IW371629, edición limitada a 1.000 relojes, tiene un precio de 10.200 euros, disponible en boutiques IWC, tiendas seleccionadas y en el sitio web de la firma.
La tercera edición limitada que IWC le dedica al 7 veces campeón del mundo de F1, Lewis Hamilton es tan llamativa como compleja
Lewis Hamilton es uno de los pilotos de Fórmula más destacados de las últimas décadas, un deportista con una marcada personalidad y, además, socio de IWC desde hace mucho tiempo. Con un estilo muy personal y llamativo, que se ha reflejado en numerosas ocasiones en sus elecciones relojeras, luciendo los más atrevidos modelos de IWC, el británico recibe una nueva edición conmemorativa, el nuevo IWC Portugieser Tourbillon Retrograde Chronograph Lewis Hamilton, un reloj clásico y muy complejo en el que lo llamativo se reduce más a los colores de su esfera y correa.
En lo que es el tercer reloj en colaboración con Lewis Hamilton y el primer Portugieser, este reloj se enfoca en los colores y el lujo, con una estética más madura, menos estentosa y con una profundidad relojera mayor. La caja, de gran tamaño, con 43,5 mm de diámetro y 15,9 mm de grosor, está hecha de platino 950 con superficies cepilladas y pulidas. Está rematado por un cristal de zafiro con un borde arqueado que sobresale marcadamente de la caja y es un reloj con mucha presencia gracias a la combinación de un diámetro considerable, un grosor que no se queda atrás y el peso del platino. La hermeticidad es de 30 metros.
En una evidente elección de tonos atrevidos por parte de Hamilton, la esfera adquiere un color verde azulado llamativo que se complementa con una correa textil tono sobre tono con un cierre desplegable de platino. El lujoso espectáculo del dial no se reduce al color, y es que la esfera porta 12 diamantes de pequeño tamaño en cada marcador horario y el logotipo del siete veces campeón del mundo de F1.
En cuanto a la mencionada complejidad mecánica, el movimiento combina un tourbillon volante de un minuto situado a las 6 horas, una indicación de fecha retrógrada y un cronógrafo con función flyback y horas/minutos transcurridos que se muestran en una única subesfera a las 12 en punto. Las manecillas, en forma de hoja y rodiadas, y los números, arábigos, mantienen el diseño clásico del Portugieser.
El fondo de caja monta un cristal de zafiro que deja ver el movimiento, el Calibre 89900, manufactura y decorado especialmente, con una masa oscilante chapada en oro de 18 quilates. Siendo uno de los más avanzados de la marca, este movimiento se ha visto ya en la colección Da Vinci, tiene una frecuencia de 4 Hz, arquitectura de rueda de pilares integrada con función flyback y puede almacenar hasta 68 horas de reserva de marcha. En cuanto al tourbillon, en más detalle, está formado por 56 piezas individuales y pesa sólo 0,675 gramos. Como característica poco convencional, tiene mecanismo hack, pudiendo detenerse por completo para poder ajustar la hora con precisión. Por último, la palanca de paleta y la rueda de escape están fabricadas en silicio y cuentan con un revestimiento de diamante -tecnología Diamond Shell- que reduce la fricción y mejora el flujo de energía en el movimiento.
Disponibilidad, referencia y precio
El IWC Portugieser Tourbillon Retrograde Chronograph Lewis Hamilton, referencia IW394008, es una edición limitada a 44 relojes, y el precio es de 164.000 euros.
IWC ha lanzado un nuevo programa de personalización para que puedas crear tu propio Portugieser Chronograph
Con la posibilidad de combinar diferentes materiales para la caja, colores de esfera y correas, ahora puedes crear tu Portugieser más personal, a tu elección, con este programa disponible en dos lugares por el momento.
Basándose en el nuevo estatus que tienen los relojes de pulsera mecánicos, hoy en día más un elemento emocional o pasional que de utilidad como instrumento y que apela al romanticismo del valor intrínseco de un reloj de este tipo, tan valioso pero ya sustituido en muchos momentos por un smartphone o smartwatch, a la hora de simplemente conocer la hora, está emergiendo en varias marcas el concepto de la personalización de los relojes, dando cada vez más al cliente la capacidad de crear un reloj adaptado al máximo al estilo y preferencias propias, ya sea creando un reloj más o menos a medida o dando una mayor cantidad de opciones en cuanto a colores, tamaños, materiales, etc. Un buen ejemplo de esto ha sido el reciente programa Certina DS +, un atractivo proyecto que a buen seguro seguirá ampliándose en el futuro. Lo que hoy vemos es algo similar pero en una marca de lujo, como es IWC, una disponibilidad limitada por el momento para crear una versión personal del Portugieser Chronograph en su referencia IW3716.
Este servicio se ofrece ahora en las boutiques insignia en el Dubai Mall y en el Shanghai Taikoo Hui Mall, una iniciativa que a buen seguro sorprenderá a muchos, y que cuenta con una selección de esferas, materiales de la caja y correas/brazaletes a tal efecto, con el objetivo de mezclar y combinar estos elementos en versiones únicas del icónico reloj. La base de esto se centra en la experiencia real, offline, pudiendo probar en vivo las distintas combinaciones, haciendo de este proceso de individualización algo realmente disfrutable.
En cuanto a cajas, el acero y el oro rosa de 18 quilates son las opciones disponibles, en el centro de la visualización, teniendo un gran número de opciones de esfera, hasta 16 colores, nuevos y dedicados a este programa, cada uno con la posibilidad de incorporar elementos aplicados chapados en rodio o en oro. Los colores incluyen tonos pastel muy atractivos para un modelo como el Portuguese, como son el turquesa, el indigo, el berenjena o el jengibre, entre otros. Para completar el reloj, la correa va también a elección, desde una colorida piel de becerro o aligátor hasta otras alternativas en cuero, como el TimberTex y correas de caucho. Por supuesto, el brazalete de acero inoxidable también puede incorporarse al reloj. El reloj final se entregará al cliente en un plazo aproximado de 3 semanas. Una pequeña “I” en un círculo, colocada en la subesfera del segundero situada a las 6 en punto, identifica cada cronógrafo como una versión configurada individualmente.
El servicio de individualización del IWC Portugieser Chronograph está actualmente disponible exclusivamente en la boutique de IWC en el Dubai Mall y en el Shanghai Taikoo Hui Mall, aunque se lanzará en otras emblemáticas ubicaciones en una etapa posterior. El precio todavía no se ha conocido, aunque probablemente será superior al de la referencia IW3716 estándar. Por ahora hay que decir que la iniciativa tiene muy buena pinta, sobre todo por los nuevos y vibrantes colores para un reloj como éste.
Junto con los dos Portofino que hemos visto, IWC ha presentado este 2023 una nueva variación del Portugieser Automatic 40, con una caja de acero inoxidable que enmarca una esfera de color salmón muy elegante.
Lanzado en 2020, el Portugieser Automatic 40 recuperó el diseño atemporal del primer Portugieser de 1939, haciendo resaltar, en un tamaño más ajustado, la distinguida alternancia de superficies satinadas y pulidas y las líneas clásicas de la caja del Portugués, de 40,4 mm de diámetro y 12,4 mm de grosor, que enmarcan maravillosamente la refinada esfera rosada con acabado en rayos de sol y con la característica escala perimetral que marca la escala del minutero, el segundero pequeño, a las 6 en punto, las manecillas, rodiadas y los números, arábigos y aplicados. El cristal de zafiro es convexo y cuenta con revestimiento antirreflejos por ambas caras.
El movimiento, visible gracias a un segundo zafiro en el fondo de la caja, es el Calibre 82200, fabricado internamente por IWC y de cuerda automática con sistema Pellaton de componentes cerámicos prácticamente resistentes al desgaste. Con una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias/hora), ofrece una reserva de marcha de 60 horas.
Dotación, disponibilidad y precio
El nuevo Portugieser Automatic 40 Salmon, referencia IW358313, se completa con una correa de piel de aligátor negra sujeta a la muñeca con un cierre desplegable de mariposa. Estará disponible en primer lugar exclusivamente en los Emiratos Árabes Unidos a partir de febrero y luego en todo el mundo a partir de abril en las boutiques de IWC, tiendas autorizadas y en el sitio web a un precio de 7.700 euros.
IWC celebra el Año Nuevo Chino con un nuevo Portugieser en un esquema de color rojo y dorado y un toque divertido para la parte posterior
La línea Portugieser reúne probablemente los relojes más bellos de IWC, abarcando además todo tipo de complicaciones que han encajado maravillosamente en el diseño de este legendario modelo. Dos años atrás IWC renovó el clásico reloj de horas, minutos y segundero pequeño de la colección Portugieser, el Automatic 40 compacto, en armonía con la tendencia generalizada de diámetros de caja más ajustados, con varios materiales de caja y opciones de color de esfera. Esta nueva referencia IW358315 continúa en consonancia con ello añadiendo un nuevo color de esfera y una divertida forma para el rotor. Se trata del IWC Portugieser Automatic 40 Edition Chinese New Year.
Las ediciones de relojes dedicadas al Año Nuevo chino están muy extendidas en la industria, tanto en marcas pequeñas como en el ámbito de la Alta Relojería. Hemos presentado numerosas de estas ediciones en el pasado, destacando el complicado Blancpain Villeret Calendario Chino Tradicional con la efigie del buey, el Breguet Classique 7145, que celebraba el Año del Tigre con un espectacular grabado, o el Pilot’s Watch Chronograph Edition «Chinese New Year» IW388107, de la propia IWC. Éstas y otras animaciones temáticas en ediciones limitadas satisfacen una parte importante del mercado de la que IWC no es ajeno. Ahora, cumpliendo con el inicio del nuevo ciclo de 2023, que según el zodíaco chino corresponde al Año del Conejo, la manufactura con sede en Schaffhausen lanzará 500 relojes Portugieser en acero con esfera burdeos, agujas doradas e índices aplicados.
Una masa oscilante que homenajea el Año del Conejo
Para subrayar el Año del Conejo, el rotor chapado en oro del Portugieser Automatic 40 Edition “Chinese New Year” tiene forma de conejo. Un grabado en el fondo de caja marca la ocasión: “2023 YEAR OF THE RABBIT”. Las opciones decorativas son evidentes y el rotor en forma de conejo lo convierte en uno de los relojes más divertidos fabricados por IWC. El tono borgoña, una variedad de rojo que simboliza la longevidad, la felicidad, el éxito e incluso trae buena suerte en la tradición china, no es nuevo en las esferas de IWC, aunque en esta ocasión la combinación con toques dorados realza aún más la esfera, completando una combinación tonal característica de la cultura china.
Sin mucho más que comentar acerca de esta edición tan especial, cuyas características técnicas son las de los últimos modelos IWC Portugieser Automatic 40, resulta un reloj realmente elegante pero casual, y es que el uso del oro se limita a una mera pincelada en una visualización realmente limpia.
La mecánica del IWC Portugieser Automatic 40 continúa protagonizada por el Calibre 82200, un movimiento de fabricación interna, automático y creado para reemplazar los calibres ETA y basados en los ETA, hasta hace poco muy utilizados por todas las marcas, incluida IWC. El 82200 es sin duda una mejor opción, con el sistema patentado Pellaton da cuerda del muelle principal, que proporciona hasta 60 horas de reserva de marcha. El diseño de este movimiento es visualmente espectacular, con una masa oscilante de gran tamaño y muy bien terminada, con piezas mecanizadas y todo visible a través del zafiro del fondo de caja.
Precio y disponibilidad
El IWC Portugieser Automático 40 Edición Año Nuevo Chino ref. IW358315 ya está disponible en la flagship store de IWC, el marketplace del mercado chino, y en la página web de IWC a un precio de 8.750 euros.
Características técnicas del IWC Portugieser Automatic 40 Edición “Año nuevo Chino” IW358315
Caja: 40,4 mm de diámetro y 12,4 mm de grosor – Caja de acero inoxidable, pulido y cepillado – Cristal de zafiro abombado y fondo de caja con cristal de zafiro – Resistente al agua hasta 30 metros
Esfera: rojo burdeos con índices y manecillas chapados en oro
Movimiento: IWC calibre 82200, manufactura – automático con sistema de cuerda Pellaton – 31 rubíes – 28.800 alternancias/hora – 60h de reserva de marcha – horas, minutos, segundero pequeño
Correa: correa de piel de becerro negra, correa adicional de piel de becerro con degradado de color burdeos – cierre desplegable de mariposa
Referencia: IW358315
Disponibilidad: limitada a 500 piezas, ahora disponible
En un lanzamiento reciente IWC ha introducido las nuevas ediciones en azul panda del Portuguese en sus modelos Chronograph y Automatic
Los 2 relojes más emblemáticos de la colección Portugieser, ahora con esferas en contraste y con espíritu náutico.
La familia Portugieser de IWC no necesita presentación, y que es una de las colecciones más aclamadas de la marca con sede en Schaffhausen. Este ya mítico modelo es un reloj de inspiración náutica nacido en la década de 1930 a petición de dos comerciantes portugueses aficionados a la navegación. Con el paso del tiempo, el IWC Portugieser se ha convertido en un verdadero clásico, aunque apenas ha sufrido cambios, algo propio de los más legendarios y acertados diseños. Estas nuevas ediciones, tanto del Portugieser Chronograph como del Automatic, cuentan con un gran atractivo, combinando perfectamente con el trasfondo náutico de esta familia de relojes gracias a sus esferas panda en azul.
IWC Portugieser Panda azul
La combinación de esfera blanca plateada con detalles en azul es uno de los estilos más clásicos que se pueden encontrar en un IWC Portugieser, puede que la combinación más emblemática. Agregando un toque náutico aún más poderoso a estos relojes. El esquema de color plateado o blanco y azul ha resultado siempre muy atractivo en el Portuguese, como en el clásico Automático de 7 días, el Cronógrafo recientemente actualizado con referencia 3716, el más compacto Automatic 40 o incluso el Yacht-Club, más deportivo. Incluso ha habido una edición Bucherer Blue del Chronograph, con una aún mayor presencia del color azul. En la misma línea, las denominadas esferas panda con subesferas en contraste han estado presentes durante mucho tiempo en la cartera de la marca.
Uniendo ambos conceptos, estas ediciones Panda blue con base en los clásicos Portugieser Automatic referencia 5007 y Portugieser Chronograph 3716, añaden atrevimiento y un reforzado contraste que mejora la legibilidad. Ambos relojes tienen un acabado en laca pulida sobre su esfera blanca, por lo que son diferentes de la clásica esfera blanca plateada con efecto metálico y, por lo tanto, más parecidas a los relojes de la colección 150 aniversario. Cuentan con números arábigos azules y manecillas en forma de hoja, así como sub-esferas en azul profundo con acabado azurage. Ciertamente se aprecia una ligera inspiración en los relojes observador de cubierta marina.
El modelo principal de la línea Portugieser, el Automatic, se caracteriza principalmente por su combinación de caja grande y un movimiento ultrapotente, siendo básicamente un Big Pilot’s Watch con un atuendo náutico y un toque de distinción. La caja de esta referencia IW500715 mide 42,3 mm de diámetro y tiene un grosor de 14,1 mm. En su interior, y llenando al máximo la caja, se encuentra el movimiento, de fabricación propia, el Calibre 52010, con su amplio rotor con sistema de cuerda Pellaton y una reserva de marcha de 168 horas (correspondientes a 7 días), que se muestra en un indicador en la esfera.
Si bien esta nueva edición azul panda podría parecer una simple evolución del clásico IW500705 (esfera plateada, detalles en azul), en realidad tiene una esfera sustancialmente diferente por su superficie brillante y contadores azul profundo en contraste para la reserva de marcha y el segundero. La hora resulta muy fácil de leer gracias a los a los ya clásicos números del Portugieser y a la circunferencia exterior de los minutos, de tipo vía de ferrocarril. Complementando la esfera azul se encuentra una correa formal de piel de aligátor en el mismo tono, cerrada con un cierre desplegable. Este IWC Portugieser Automatic Blue Panda IW500715 forma parte de la colección permanente y tendrá un precio de venta de 13.300 euros (mismo precio que otras versiones de acero).
Especificaciones del IWC Portugieser Automatic Blue Panda IW500715
42,3 mm de diámetro y 14,1 mm de grosor – Caja de acero, cristales de zafiro, resistente al agua hasta 30 metros – Esfera blanca lacada, contadores azules – Calibre automático manufactura 52010, frecuencia de 4 Hz, reserva de marcha de 7 días – Correa de piel de aligátor con cierre desplegable – Referencia IW500715 – 13.300 euros de precio.
El segundo reloj presentado, también en versión azul panda, es una variante del clásico Portugieser Chronograph 3716, piedra angular de la colección, así como el modelo más accesible de la misma, este reloj ha permanecido casi sin modificaciones durante alrededor de 25 años. Actualizado en 2020 con un nuevo movimiento manufactura, convirtiéndose así en la referencia 3716 (pero siendo visualmente idéntico a su predecesor, el 3714), mide unos razonables 41 mm de diámetro y 13,1 mm de grosor y se caracteriza por su visualización vertical.
En el interior encontramos el Calibre 69355, fabricado por ValFleurier, un movimiento automático integrado con rueda de pilares, ahora visible bajo el fondo de caja, que monta un cristal de zafiro. Una vez más, esta nueva versión azul panda es muy similar al ya existente modelo plateado con detalles en azul (referencia IW371605) pero en realidad tiene una esfera lacada en blanco brillante con diferente color y superficie. La correa también se actualiza, y es que, habiendo visto el Portugieser Chronograph acompañado de correas de aligátor, un brazalete de acero o incluso con correas ecológicas, este nuevo Panda monta una correa de caucho azul texturizado con hebilla de tipo ardillón, lo que le suma un extra de deportividad a esta edición. Este reloj también forma parte de la colección permanente y tiene un precio de 8.950 euros (el mismo precio que otros modelos clásicos de acero).
Características técnicas del IWC Portugieser Chronograph Blue Panda IW371620
41 mm de diámetro y 13,1 mm de grosor, caja de acero, cristales de zafiro, resistente al agua hasta 30 metros, esfera blanca lacada, contadores azules, Calibre 69355 automático, de fabricación propia, con rueda de pilares, frecuencia de 4 Hz, reserva de marcha de 46 h, correa de caucho azul con hebilla de tipo ardillón, referencia IW371620 – 8.950 euros.
Ambos relojes ya están disponibles en el sitio web de IWC y en tiendas de la marca.
IWC ha lanzado una nueva versión del Portugieser Calendario Perpetuo caracterizada por una llamativa esfera verde oscuro con un acabado en rayos de sol, que monta manecillas rodiadas, así como los índices, que van aplicados, en una interesantísima apariencia para el dial.
IWC presentó el Portuguese Calendario Perpetuo en 2020, incorporando un módulo de calendario diseñado por el maestro relojero Kurt Klaus, integrado en el calibre 82650, de manufactura IWC. un movimiento que reconoce las diferentes duraciones de los meses y los años bisiestos sin necesidad de ningún ajuste hasta el año 2100, siempre en caso de que el reloj funciona continuamente.
Además, la visualización de la fase lunar perpetua es tan precisa que sólo se desvía de la órbita del satélite terrestre un día cada 577,5 años. Continuando con la esfera, Las indicaciones para la fecha, el mes y el día de la semana se distribuyen en tres subesferas ubicadas a las 3, 6 y 9 horas. Un pequeño indicador situado en la subesfera que indica del día de la semana cuenta los años hasta el próximo año bisiesto.
Con unas medidas de 42,4 mm de diámetro y 13,8 mm de grosor, la caja clásica de este Portugieser es de acero fino y alterna superficies pulidas y satinadas. La resistencia al agua está garantizada hasta una presión de 3 bar (aproximadamente 30 metros / 100 pies). El ancho entre asas es de 22 mm.
El movimiento, como en la mayoría de las novedades de IWC, es visible a través del fondo de caja, que monta un cristal de zafiro. Espectacular sobre todo gracias a la gran masa oscilante, el calibre 82650 está equipado con un sistema de cuerda Pellaton y componentes hechos de cerámica de óxido de circonio que prácticamente se mantienen sin desgaste. La frecuencia es de 4 Hz (28.800 alternancias por hora), ofreciendo una reserva de marcha de 60 horas.
Completado con una correa de piel de aligátor verde asegurada a la muñeca con un cierre desplegable de acero, el IWC Portugieser Perpetual Calendar con esfera verde (ref. IW344207) tiene un precio de 23.600 euros.
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