Geophysic® 1958. Un homenaje a la ciencia y la precisión relojera
Desde su creación en 1833, la Manufactura Jaeger-LeCoultre se ha impuesto por los avances técnicos que elevaron rápidamente a sus guardatiempos al rango de referencia en materia de robustez y precisión. Por ello, no es sorprendente que, a mediados del siglo pasado, cuando una comunidad científica compuesta por sabios de muchos países se preparaba para llevar a cabo un programa de exploraciones importantes en el ámbito del Año Geofísico Internacional, la Grande Maison del Valle de Joux haya decidido asociarse con esta iniciativa única y creara un instrumento de una precisión excepcional, el reloj Geophysic®.
En 2014, Jaeger-LeCoultre rinde homenaje a este icónico guardatiempos revelando dos relojes exclusivos, un modelo en versión acero y oro rosa y otro de platino. Síntesis de investigaciones y del dominio técnico relojero de la Manufactura, dichas piezas están animadas por un movimiento automático de una fiabilidad y una resistencia a toda prueba. Se presentan en un diámetro de 38,5 milímetros, al tiempo que permanecen fieles a la estética del modelo original con una esfera pura y extremadamente legible.
La leyenda del Cronómetro Geophysic®
Entre los modelos más importantes del patrimonio de Jaeger-LeCoultre, el Cronómetro Geophysic® tiene una historia particular. Creado en 1958, Año Geofísico Internacional, se posiciona como el símbolo de la precisión y de la resistencia, además de conservar una pureza estética incontestable. Equipado con el calibre 478BWSbr, este movimiento surgido de los relojes militares integra lo mejor de la técnica relojera de la época: un stop segundos para un ajuste preciso de las horas, un volante de glucydur* que brinda una gran estabilidad a los cambios de temperaturas, un volante con parachoques a prueba de golpes y un índice con cuello de cisne para una regulación micrométrica de la precisión, sin olvidar la indispensable caja interior de hierro dulce, que protege a este extraordinario mecanismo de los nefastos efectos del magnetismo.
Todas estas características propulsaron a este símbolo de la pericia relojera a la cumbre de la Alta Relojería y lo convirtieron en el regalo indicado para el primer hombre que logró dirigir una expedición bajo el Polo Norte, en particular porque este instrumento fuera de serie también fue concebido para enfrentarse a campos magnéticos de hasta 600 gauss de intensidad y conservar así su prodigiosa precisión en toda circunstancia.
El Año Geofísico Internacional
En 1958, cuando el mundo estaba dividido en dos bloques y la Guerra Fría causaba estragos, diversos organismos internacionales resolvieron unir sus fuerzas para descubrir las últimas regiones inexploradas de nuestro planeta. Así, se inició un primer programa de investigación elaborado conjuntamente por 67 naciones del este y del oeste. En una época en la que la conquista espacial acababa de empezar, se lanzaron cohetes espaciales para estudiar la composición de las capas superiores de la atmósfera. Igualmente, en el transcurso del Año Geofísico Internacional, el estudio de los fondos marinos permitió confirmar la teoría del desplazamiento de las placas tectónicas. Los polos, prácticamente desconocidos en aquel entonces, también eran el centro de la atención universal. Se establecieron estaciones de observación permanentes en el Antártico, mientras que un submarino estadounidense cruzó del Océano Atlántico al Océano Pacífico pasando bajo el casquete glaciar que recubre el Polo Norte.
El 1° de agosto de 1958, el primer sumergible a propulsión nuclear de la historia, que llevaba el nombre de USS Nautilus en homenaje al fantástico submarino imaginado por Julio Verne, se lanzó en el secreto más absoluto con el objetivo sin precedentes de vincular los dos océanos por la vía más directa, navegando bajo la banquisa que recubre el Ártico. Después de tres días de inmersión, el Nautilus pasó a la vertical del globo terrestre sin que nadie, aparte la tripulación, supiera nada acerca de esta hazaña.
Aún hoy, la Manufactura Jaeger-LeCoultre se siente particularmente orgullosa de haber contribuido con esta empresa de alcance tan excepcional y con su profunda significación simbólica.
“Homenaje al Geophysic®” – Una pieza histórica asociada a la fiabilidad de Jaeger-LeCoultre
El diseño de estos guardatiempos, que se inspira en el modelo original, ha mejorado aún más la legibilidad absoluta y la distinción del instrumento histórico. Los tres relojes homenaje al Geophysic® 1958 poseen un diámetro de 38,5 milímetros, ligeramente ampliado con respecto del original para responder a las exigencias de confort del siglo XXI. Fiel al espíritu del Calibre 478BWSbr, que fue empleado para las investigaciones asociadas al Año Geofísico, las tres nuevas piezas están equipadas con el Calibre Jaeger-LeCoultre 898/1, considerado como uno de los movimientos de manufactura de carga automática más precisos y fiables jamás construidos.
Este movimiento de excepción asocia lo mejor de la técnica del siglo XXI : stop segundos para ajustar la hora con precisión, volante de regulación micrométrica mediante tornillos sobre el aro, Kifparechoc* a prueba de golpes, engranajes Spyr para una transmisión fluida del par en el rodaje, remontaje automático dotado de un rodamiento de esferas de cerámica que no requiere lubricación… sin olvidar, naturalmente, la caja interior de hierro dulce que protege los mecanismos de los nefastos efectos del magnetismo.
Las tres agujas centrales destinadas a la visualización de las horas, de los minutos y los segundos describen sus evoluciones ininterrumpidas sobre una esfera granallada blanca ornamentada con la inscripción “Geophysic®” y con la firma Jaeger-LeCoultre a las 12 horas. La sucesión de los índices aplicados está interrumpida por los dígitos 3, 6, 9 y 12 para respetar, hasta en los más mínimos detalles, la disposición y los códigos de esta pieza mítica. Estos guardatiempos de Alta Relojería, que asocian de manera única utilidad y estética, llevan la huella característica de la Grande Maison, que se reconoce en el material luminiscente de color histórico de los puntos situados ante los índices sobre el realce de la esfera. Las agujas de tipo espada, por su parte, están rodiadas para la versión de acero, mientras que las destinadas a la versión de oro rosa de 18 quilates lucen un caluroso matiz dorado. En concordancia con la perfecta sobriedad de una esfera cuya pura funcionalidad realza una elegancia atemporal, la refinada caja evoca las cualidades fuera de serie de esta pieza de excepción. Hermética hasta 100 metros, luce en el fondo el emblema característico, que juega con la J y la L de Jaeger-LeCoultre impresas sobre un globo terráqueo rodeado por las líneas de latitud y longitud.
Cada versión del reloj Geophysic® está acompañada por un brazalete de piel de aligátor dotado de una hebilla de hebijón de ejecución inédita cuyos colores se armonizan con el metal de la caja: aligátor negro para el modelo de acero y marrón chocolate para la versión de oro rosa.
Este instrumento legendario estará reservado a muy pocos apasionados. Ellos tendrán el privilegio de lucir en su muñeca un guardatiempos que rinde homenaje a un apasionante capítulo de la historia de las ciencias. Serán editados 800 ejemplares del reloj Geophysic® 1958 de acero, mientras que la versión de oro rosa de 18 quilates verá la luz en una serie limitada a 300 piezas.
Un modelo de platino, producido en serie limitada de 58 piezas, también estará disponible en 2014. Su esfera, otro rostro del reloj Geophysic®, está animada por índices aplicados, los dígitos 6 y 12 y las agujas rodiadas de tipo espada que indican las horas, los minutos y los segundos. Esta versión luce un brazalete de piel de aligátor azul.
El control de 1000 horas – la fiabilidad de Jaeger-LeCoultre
Hoy, todos los guardatiempos Jaeger-LeCoultre deben someterse al control de 1000 horas, “1000 hours control”, que atesta su precisión y fiabilidad. Con él la Manufactura Jaeger- LeCoultre ha impuesto una nueva norma de calidad relojera. Diferente de la prueba de cronometría, que sólo se concentra en una parte del movimiento, el control de 1000 horas se lleva a cabo en el reloj terminado y puesto en caja. Él será sometido a seis semanas de controles, en seis posiciones y no sólo en el reposo sino también efectuando un movimiento rotativo que simula el uso.
Al igual que el modelo original, la reedición del reloj Geophysic® 1958 desvelada por la Manufactura Jaeger-LeCoultre está destinada a marcar nuestro tiempo con su fuerte huella. Su ilustre filiación, apreciada por los apasionados de las ciencias y de la relojería, y la evocación de las hazañas realizadas a escala mundial para explorar las regiones aún desconocidas del globo terráqueo constituyen una irresistible incitación al descubrimiento y la aventura.
En 2014, el espíritu del reloj Geophysic® está más vivo que nunca.
* Glucydur y Kifparechoc no son marcas pertenecientes a Jaeger-LeCoultre.
El reloj Geophysic® 1958 – Características técnicas
Movimiento:
Movimiento mecánico de carga automática, Calibre Jaeger-LeCoultre 898/1
43 horas de reserva de marcha
202 piezas
29 rubíes
28.800 alternancias por hora
3,30 mm de altura
Esfera:
Versión de acero y de oro rosa:
– inscripción “Geophysic®” a las 6 horas, firma Jaeger-LeCoultre a las 12 horas
– dígitos 3, 6, 9 y 12 e índices aplicados rodiados (versión de acero) y dorados (versión de oro rosa)
– indicadores luminiscentes
Versión de platino – boutique:
– inscripción “Geophysic®” y firma Jaeger-LeCoultre a la altura de las 12 horas
– dígitos 6 y 12 e índices aplicados rodiados
– indicadores luminiscentes
Agujas:
Horas, minutos: tipo espada, rodiadas (versión de acero y de platino) y doradas (versión de oro rosa)
Segundero central
Funciones:
Horas, minutos, segundos
Caja:
– 38,5 mm de diámetro
– 11,40 mm de altura
– caja interior de hierro dulce
– grabado sobre el fondo: homenaje al año geofísico
– bisel y asas pulidas, banda de carrura satinada
– Hermeticidad: 10 bar
Brazalete y hebilla:
Versión de acero: aligátor negro, hebilla de hebijón de acero inoxidable
Versión de oro rosa: aligátor color chocolate, hebilla de hebijón de oro rosa de 18 quilates
Versión de platino: aligátor azul, hebilla de hebijón de platino
Referencias:
Versión de acero: Q8008520, serie limitada a 800 piezas
Versión de oro rosa de 18 quilates: Q8002520, serie limitada a 300 piezas
Versión de platino: Q800652j, serie limitada a 58 piezas, disponible únicamente en las boutiques Jaeger-LeCoultre