IWC incorpora el legendario calendario perpetuo desarrollado hace décadas a la línea Portofino con dos modelos de diseño armonioso y una gran belleza
El nuevo Portofino Perpetual Calendar se ofrece en dos referencias por el momento, una en acero inoxidable con esfera plateada y agujas y elementos aplicados y rodiados (ref. IW344601), y la otra en oro rojo 5N de 18 quilates con esfera plateada y manecillas e índices chapados en oro (ref. IW344602). A pesar de ser una colección subestimada y con menos pretendientes que las principales líneas de IWC, el esfuerzo puesto en estos relojes y el fino resultado son realmente impresionantes.
Con un diámetro de caja de sólo 40 mm, el Portofino Calendario Perpetuo es actualmente el reloj con esta complicación más pequeño en las colecciones de IWC. Con una resistencia al agua de 5 bar (50 metros / 165 pies), estos relojes tienen un grosor total de 12,7 mm, incluido el cristal de zafiro con borde arqueado y que presenta un revestimiento antirreflejos en ambos caras. Las proporciones entre caja, esfera y elementos como los contadores son perfectas, fruto de un minucioso trabajo de prototipado previo, resultando tremendamente agradable a la vista y con un elevadísimo nivel de elegancia.
Desarrollado en la década de 1980 por el ex relojero principal de la firma, Kurt Klaus, y con menos de 100 piezas ingeniosamente dispuestas, el mecanismo de calendario perpetuo de IWC reconoce las diferentes duraciones de los meses e inserta automáticamente el día extra correspondiente al año bisiesto, cada cuatro años a finales de febrero. Estos excepcionales relojes continuarán funcionando sin intervenciones manuales hasta 2100, cuando se omite el año bisiesto debido a una excepción en el calendario gregoriano. Todas las indicaciones en cada subesfera están sincronizadas entre sí y se pueden ajustar simplemente con la corona.
Un fabulosa limpia visualización del calendario perpetuo
La información del calendario se muestra por medio de tres subesferas. La fecha se muestra a las 3 horas, el mes a las 6 en punto y el día de la semana, junto con el año bisiesto, en la posición de las 9.
La visualización de la fase lunar se integra en la indicación del mes, que muestra la luna contra un refinado telón de fondo que representa un cielo nocturno repleto de estrellas. Gracias a un tren de engranajes reduccionista calculado con precisión, se desvía de la órbita real de la luna sólo un día después de 577,5 años.
Avanzando el módulo del calendario con un solo impulso durante la noche, el Calibre 82650, manufactura IWC, late a una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora) y garantiza una reserva de marcha de 60 horas gracias al eficiente sistema de cuerda automática desarrollado en los años 50 por el ex director técnico de IWC, Albert Pellaton.
Los componentes del sistema de cuerda automática que están sujetos a grandes esfuerzos, como la leva, en forma de corazón, están hechos de cerámica de óxido de circonio, permaneciendo prácticamente sin desgaste.
Los meticulosos acabados y la gran masa oscilante, calada y con el emblemático medallón “Probus Scafusia” en oro macizo, se pueden admirar a través del fondo, que monta un segundo cristal de zafiro.
Dotación, referencias y precio
Ambas versiones están equipadas con suaves correas azules hechas de piel de becerro suizo rastreable (el ancho entre asas es de 20 mm). La versión de acero se ajusta a la muñeca mediante un cierre desplegable doble, mientras que el modelo dorado presenta una hebilla sencilla de tipo ardillón.
El IWC Portofino Perpetual Calendar ref. IW344601, versión de acero, tiene un precio 25.500 euros, mientras que la referencia IW344601, en oro rojo 5N, puede adquirirse por 36.100 euros.
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