IWC Pilot’s Watch Mark XX IW328207 y IW328208
IWC lanza dos nuevas versiones del Pilot’s Watch Mark XX, modernizando el icónico IWC Mark 11, destinado a la Fuerza Aérea Británica tras la Segunda Guerra Mundial.
Las últimas incorporaciones a la línea Pilot’s Watch Mark XX montan, al igual que los Mark XX referencias IW328201 y IW328203 y demás variaciones que vimos el año pasado, cajas de acero inoxidable de 40 mm de diámetro y 10,8 mm de grosor, con nuevas esferas plateadas que complementan la línea de colores que ya incluye esferas azules, verdes y negras.
Uno está equipado con una correa de piel de becerro negra (ref. IW328207) y el otro se ajusta a la muñeca con un brazalete de acero inoxidable de 5 eslabones de alta calidad (ref. IW328208). En ambos casos, gracias a su renovado perfil de caja y sus asas, más delgadas y curvas, el reloj ofrece un ajuste óptimo en la mayoría de las muñecas.
El sistema de cambio rápido EasX-CHANGE de IWC permite al usuario cambiar la correa o el brazalete fácilmente y sin necesidad de ninguna herramienta adicional. Además del brazalete de acero inoxidable, la selección de correas va desde la piel de becerro hasta el caucho, duradero, flexible, impermeable y disponible en varios colores.
Esferas en plateado casi blanco
La parte gráfica de la esfera está protagonizada por grandes números e índices, combinados con los elementos luminiscentes de la esfera y las manecillas, negras, por lo que la magnífica legibilidad habitual de los relojes de aviador de IWC está garantizada. Como detalle, no podía faltar la presencia del característico índice triangular situado a las 12 en punto, un elemento definitorio de los relojes de piloto de la firma.
El Pilot’s Watch Mark XX incorpora el Calibre 32111, manufactura IWC, un movimiento automático de 4 Hz (28.800 alternancias por hora) con un sistema de cuerda de trinquete bidireccional que acumula una reserva de marcha de 120 horas. La caja interior de hierro dulce protege el movimiento de los efectos de los campos magnéticos. Como en el resto de modelos recientes, el cristal frontal va especialmente asegurado para permanecer en su lugar incluso en caso de una caída repentina de presión en la cabina.
Grabado en el reverso del reloj seguimos encontrando una representación de un Junkers Ju 52 de la década de 1930, el avión de transporte trimotor alemán cuyos instrumentos de cabina inspiraron a los diseñadores de IWC cuando crearon el legendario Mark 11.
Estas nuevas referencias de esfera plateada mantienen la hermeticidad de 100 metros gracias a su corona atornillada y tienen unos precios respectivos de 5.750 euros para la referencia IW328207 (con correa) y de 6.850 euros para el modelo con brazalete (IW328208).